sábado, 16 de febrero de 2013

LA OTRA CRUZ DE FERRO

Son varias las entradas en este blog en las que he tratado sobre este  monumento enclavado en pleno Camino de Santiago, explicando que a pesar de sus sencilla construcción (piedras, madera y una cruz de hierro) se ha convertido en unos de los monumentos mas conocidos y anhelados por los peregrinos jacobeos.



Es  también conocida la tradición de depositar una piedra al llegar a este crucero (seguramente el más grande de España), con la particularidad de que los peregrinos deben traer esa ofrenda desde su lugar de origen, así que el amontonamiento de piedras no solo es espectacular por sus dimensiones, sino por la belleza de las piedras (todo el mundo escoge una piedra rara y bonita) y por el hecho de que allí se concentran piedras de todos los lugares del mundo.




No es momento ahora de profundizar sobre el origen del crucero.Como se sabe hay unas cuantas teorías que postulan sus orígenes en los conocidos "montes de Mercurio" romanos, en costumbres prerromanas relacionadas con la sanación de enfermos en los cruces de los caminos, o en un origen mucho más practico, como es la de simples mojones que delimitarían cotos y propiedades de época medieval.
Sea como fuere, la coronación del montículo por una cruz cristianizó el lugar, y el aporte continuado de las ofrendas de los peregrinos incrementa cada día la leyenda y la altura del  monumento.
Tampoco entraré en la polémica sobre su nombre correcto (Cruz de Ferro o de Fierro), polémica que suele acabar como el rosario de la Aurora cada vez que he visto debatir este tema. Cierto es que el vocablo   "fierro" o "fierru" queda más "leonés", pero yo he escuchado toda la vida en Maragatería decir  "ferreiro" (herrero) "ferruño" y "ferruñoso" (oxido y oxidado). Así que cada uno la llame como le venga bien, que a mi me valen los dos vocablos.

El motivo real de esta entrada es la de colocar unas fotos de otro amontonamiento de piedras cercano a la emblemática cruz, aunque desconocido por la gran mayoría.
La primera vez que supe de su existencia fue gracias a un artículo publicado de Miguel S. Peña en la revista Argutorio en el año 2000 titulado " Los caminos A Galicia, Astúrica de Potata y Herman Künig, en una mezcolanza solo a medias irónica" , en el que aparece un pequeño plano dibujado por el autor.
Años después, acompañado por mi buen amigo Mark, localicé el montículo. Me sorprendió su altura, pues a pesar de que no ha recibido las aportaciones de los peregrinos, su porte es magnífico, superando en altura a algunos  pinos que lo rodean. Está situado al norte de la Cruz de Ferro, a unos 600 Mts en línea recta, algo más al utilizar los caminos. En la siguiente foto, la cruz señala la Cruz de Ferro y el Camino de Santiago, y la flecha el amontonamiento de piedras, que como veremos después, seguramente estuvo también coronado por una sencilla cruz


   




Al contrario que su famoso compañero, este crucero es una acumulación de rocas y lajas de pizarra de la zona, sin la acumulación de cantos y piedras de distinta procedencia. Aún siendo todas las rocas iguales, sorprende la fuerza simbólica que le proporciona su gran altura y su ubicación en un cruce de caminos.




Para Miguel Peña, el origen de todas estos amontonamientos de piedras parece bastante claro:

"La primera mención -conocida- de nuestra Cruz de Ferro data del año 1103, y se trata del Privilegio que el Rey Alfonso VI concede a Gaucelmo para que en el coto de su alberguería nadie pudiera importunarle. En este documento ya se habla de "un coto redondo, limitado por las cruces que se hallaban en su derredor" (lo cita Matías Rodríguez en su Historia de Astorga, pág. 167). La nuestra es la cruz situada "en la encrucijada de Astorga de Potata" (Ml. Rodríguez), y esta Astúrica de Potata, aparece ya en el año 923, cuando Ansemiro da la iglesia de Turienzo a San Pedro de Montes ("per via que discurre de Astorica de Potata..."), y que no es otra que el camino que desde allí lleva directamente hasta Andiñuela. No se trata pues de Montes de Mercurio, aras votivas en favor del dios de los caminos, al que había que ofrendar una piedra más; sino simplemente arca o mojón que delimita el territorio propio frente a las posesiones de otros. En el caso de La Cruz de Ferro está muy claro, había que delimitar el territorio frente a las posesiones de la Iglesia de Santa María de Irago, sita en Astúrica de Potata, y que después fue anexionada por Foncebadón. La otra cruz, que todavía alcanzó a ver Fray Martín Sarmiento en el siglo XVIII, estaba en la bajada al valle de Tabladillo, donde también existían instalaciones religiosas de importancia (allí tuvo lugar el célebre Concilio de Tabladillo en el 946). De otra, que estuvo al pie de Candanedo, donde hoy está el repetidor de televisión, lo único que se conserva es una gran cantidad de piedras diseminadas, y aún no tenemos claro frente a qué institución -civil o eclesiástica- se levantó."

 En todo caso, desde esta primera cita en el año1103, no hay que olvidar que ha pasado casi un milenio, y que la Historia se escribe día y día y en este caso piedra a piedra.
 Por eso no solo hay que tener en cuenta sus orígenes, sino  el icono cultural en el que se ha convertido. 
Y puestos a contentar a todos:
 pudieron ser un sencillo monumento indígena, asimilados para el culto mercurial por Roma, utilizados mil años después  por Gaucelmo para marcar su alberquería y convertidos en lo que son actualmente por la magia del Camino de Santiago.  

12 comentarios:

Freckled Philologist dijo...

Preciosa entrada. Me ha encantado saber más historia de mi nuevo entorno. Has logrado interesarnos en cada lugar con creatividad, descripciones inteligentes y un hermoso amor propio de estos sitios tan atrayentes que encontramos en León.
Gracias de esta californiana-astorgana -besos.

Juan Carlos Campos dijo...

Gracias a ti por alegrarme la mañana, y por hacer de Maragatería tu segunda tierra.

Asociación Mineralógica Aragonito Azul dijo...

Nos alegramos que sigas en la brecha dando a conocer datos y curiosidades de nuestra bella región. No hemos olvidado el tema de la conferencia sobre los petroglifos, te haremos una visita más adelante y concretaremos. Un saludo y ánimos.

Juan Carlos Campos dijo...

Aquí me tenéis. Haremos un intercambio de conocimientos sobre las piedras, y yo sé que saldré ganando con el cambio, pues tengo mucho que aprender sobre fósiles y minerales.
Aviso de que soy muy preguntón, así que no os arriendo la ganancia...:-)

EnestG dijo...

Hola Juan Carlos gracias por esta entrada.

Yo también conocí ese mojón gracias al artículo que has citado. Sinceramente creo que la Cruz de Fierro es más famosa que el otro mojón por estar en el camino famoso y por tener su humilde poste con su humilde cruz de humilde metal. Pero eso es otra historia. Pues creo que ambos tuvieron una misma función, fuera la que fuera, ambos están junto a un camino, están relativamente pegados... Yo no puedo descartar ni afirmar si eran o no simples mojones delimitadores, o si eran altares paganos, o si la Cruz de Fierro era un altar pagano cristianizado... sencillamente digo que a lo largo de los caminos, o montañas, o pueblos, no es raro que haya una cruz devezencuando colgada o puesta en algún sitio.

Sin embargo tengo una pequeña teoría que me gustaría exponer, para que sea debatida si a alguien le interesa. Creo que estos mojones sí podrían ser parte de un sistema de límites o arcas para delimitar un territorio, pero señalo que no son los límites del actual Foncebadón, ya que mil veces oí que la cruz era un límite de Manjarín y Fuencebadón. Mi teoría se funda sobre la gran cantidad de topónimos referentes a límites que hay en torno a Foncebadón, pero dentro de sus fronteras actuales, es decir, como si esos topónimos delimitaran un antiguo territorio de la aldea, o del hospital, o de lo que sea. Por ejemplo, a parte de los dos mojones, tenemos Candaneo, que significa lugar con cándanos, lugar con palos clavados, o postes altos, en un cerro, seguro que era un límite. Quriosamente hoy en día hay un cándano nuevo, una antena. Tenemos también bustarao, bustenrío...

Pero también tengo otra teoría, tal vez más práctica. Es sabido que entre el Acebo y Foncebadón había unos postes para marcar el camino, ya que con las nevadas se podía uno perder. Pues posiblemente la Cruz no fuera más que uno de esos postes, sobreviviente por estar junto al camino moderno y sobre el mojón. En el otro mojón está el camino que iba también al Bierzo pero por detrás de Manjarín, así que a lo mejor era para marcar, también. Hay cerca de la Cruz un lugar llamado Palofito, tal vez fuera por uno de estos postes, tal vez fuera otro límite del coto que he comentado...

Juan Carlos perdona por la extensión de esta especie de monólogo. Tu artículo me cautivó como peudes ver. Felicidades.

EnestG dijo...

Hola Juan Carlos gracias por esta entrada.

Yo también conocí ese mojón gracias al artículo que has citado. Sinceramente creo que la Cruz de Fierro es más famosa que el otro mojón por estar en el camino famoso y por tener su humilde poste con su humilde cruz de humilde metal. Pero eso es otra historia. Pues creo que ambos tuvieron una misma función, fuera la que fuera, ambos están junto a un camino, están relativamente pegados... Yo no puedo descartar ni afirmar si eran o no simples mojones delimitadores, o si eran altares paganos, o si la Cruz de Fierro era un altar pagano cristianizado... sencillamente digo que a lo largo de los caminos, o montañas, o pueblos, no es raro que haya una cruz devezencuando colgada o puesta en algún sitio.

Sin embargo tengo una pequeña teoría que me gustaría exponer, para que sea debatida si a alguien le interesa. Creo que estos mojones sí podrían ser parte de un sistema de límites o arcas para delimitar un territorio, pero señalo que no son los límites del actual Foncebadón, ya que mil veces oí que la cruz era un límite de Manjarín y Fuencebadón. Mi teoría se funda sobre la gran cantidad de topónimos referentes a límites que hay en torno a Foncebadón, pero dentro de sus fronteras actuales, es decir, como si esos topónimos delimitaran un antiguo territorio de la aldea, o del hospital, o de lo que sea. Por ejemplo, a parte de los dos mojones, tenemos Candaneo, que significa lugar con cándanos, lugar con palos clavados, o postes altos, en un cerro, seguro que era un límite. Quriosamente hoy en día hay un cándano nuevo, una antena. Tenemos también bustarao, bustenrío...

Pero también tengo otra teoría, tal vez más práctica. Es sabido que entre el Acebo y Foncebadón había unos postes para marcar el camino, ya que con las nevadas se podía uno perder. Pues posiblemente la Cruz no fuera más que uno de esos postes, sobreviviente por estar junto al camino moderno y sobre el mojón. En el otro mojón está el camino que iba también al Bierzo pero por detrás de Manjarín, así que a lo mejor era para marcar, también. Hay cerca de la Cruz un lugar llamado Palofito, tal vez fuera por uno de estos postes, tal vez fuera otro límite del coto que he comentado...

Juan Carlos perdona por la extensión de esta especie de monólogo. Tu artículo me cautivó como peudes ver. Felicidades.

Juan Carlos Campos dijo...

Estoy de acuerdo, ErnestG. A veces queremos comprender las cosas desde el punto de vista actual, olvidando que las cosas eran muy distintas en épocas pasadas. Y no solo las cosas (lugares, fronteras) sino las personas que vivieron tiempo atrás.
Las cosas no son como las vemos, sino como fueron, y a veces lo único que podemos hacer es imaginar un término medio..

Enrique Soto dijo...

Juan Carlos, gracias por esta entrada sobre La Cruz de Fierro.
Reproduces en ella muchas de las palabras de Miguel S. Peña - Ferruelo. Como sabes hemos protagonizado un histórico ya debate sobre el nombre de la cruz. Puedes ves mis intervenciones principales en mi libro Pasión Leonesa.
Me has animado y quizá prepare yo una entrada sobre este tema en mi blog incorporando también alguna grabación que testimonie el uso del nombre por las gentes del entorno.
Saludos cordiales.

Juan Carlos Campos dijo...

Hola Enrique,
Sé de la legendaria discusión sobre el nombre propio de la cruz.
Como digo en la entrada, a mi me valen los dos vocablos y ninguno me suena extraño (El 2º apellido de mi mujer es Fierro). En todo caso, el descontrol que hay sobre este tema, con carteles de la Junta y Diputación empleando cada vez un nombre diferente no ayuda nada. Así que ánimo y adelante con esa entrada en tu blog.

Juan Carlos Campos dijo...

Gracias José Luis. Buena afición la tuya, de la que tomo nota, y muy interesante e instructivo tu blog.

Buscapiedras dijo...

Un saludo Campos.

Por si te interesa, y referente al tamaño del monticulo de la Cruz de Ferro, este presenta en la actualidad un tamaño menor al que llego a tener. La razon esta en que se utilizo parte de sus piedras para el acopio de la carretera que pasa a su lado durante la construccion de la misma.
En cuanto a la situacion estrategica de ambos a mi entender a modo de (portal).

Un salu2

Unknown dijo...

Hola.Creo que la explicación a este amontonamiento de piedras un poco al norte de la actual Cruz de Ferro se puede encontrar en las fotos de vuelo americano de 1958 (disponibles en jcyl).Sí observáis la foto de esta zona veréis que poco antes del actual amontonamiento el camino se divide en dos,uno de ellos el más al norte,se dirige hacia Folgoso del Monte para retomar de nuevo el actual camino un poco antes de Riego de Ambros. Ese amontonamiento se sitúa justo al lado de este camino alternativo,bastante usado hasta mediados del siglo pasado.
Me parece la explicacion más lógica.
Saludos.