jueves, 11 de septiembre de 2008

LA PEÑA DE LAS HERRADURAS

Allá por el mes de Junio, colgué un artículo titulado "Chana de Somoza". En el, aparecían fotos de un paraje que visité por muchos motivos: los círculos de Belisana, o las corazonadas de gente como Carlos Arias o Ambrosio. Otra buena razón fue seguir la beta de las diabasas ( la moraliza) desde La Peñona .
Una de las muchas rocas que me llamó la atención fue un pequeño afloramiento aislado de las grandes rocas cercanas. Está orientada al sur, justo hacia la cumbre del Teleno, y presenta una superficie vertical sospechosamente lisa (que se ha salvado milagrosamente del deterioro general de la roca) , en la que me pareció intuir algún trazo semicircular.






Parte posterior, orientación al Teleno y deterioro


Al ver después las fotos ampliadas, observé claramente muchas “ferraduras”, figuras asociadas por la tradición popular al caballo del Patrón Santiago o al Babieca del Cid Campeador, según las zonas.
Sin embargo las herraduras o semicírculos han formado parte desde siempre de los petroglifos prehistóricos, junto con cazoletas, espirales, círculos mas o menos complejos, cruciformes, laberintos, etc.
En visitas posteriores y con la luz del atardecer, comprobé que los grabados eran mucho más numerosos de lo que yo creía al principio.




Lo siguiente fueron las fotos nocturnas, una apuesta segura para ver lo que escondía la piedra. (Este tipo de estudio es inocuo para los grabados y sustituye perfectamente a los calcos que solo deben efectuar los profesionales. (Por cierto, la costumbre de repasar los grabados con tiza o yeso está totalmente desaconsejada).

Si queréis saber si compensa salir por la noche de casa, hacer 25 km para llegar a Chana de Somoza, caminar cerca de las majadas de ovejas con los mastines leoneses sueltos y celosos de SU territorio, llegar con la luz de la luna a las rocas y encender la linterna, la respuesta es esta:


Fue como descubrirla por primera vez, porque solo en ese momento pude apreciar el medio centenar de figuras geométricas, formadas por los círculos y semicírculos con pequeñas cazoletas en su interior, cruciformes y otras figuras inacabadas
También se pueden observar en la parte central de la roca surcos de trazo fino que unen diferentes formas circulares para componer figuras más complejas con cierto aspecto antropomórfico.


Parte izquierda


Parte derecha
Pintar digitalmente los grabados permite contemplar el conjunto. No es una visión totalmente objetiva (las sombras igual que ayudan, pueden en ocasiones equivocar), pero en líneas generales el resultado final es muy parecido al real.
Parte izquierda
Parte derecha

Como podeis ver, las figuras y motivos representados encajan con la temática prehistórica. Otra cosa son los cruciformes, que suelen ser considerados como símbolos mas modernos. Alguno de estos parecen representar figuras humanas con armas y otros, quizá fueron realizados con posterioridad.
Los lugareños no conocían los grabados, no hay toponimia en la zona referente a herraduras ni nada parecido y quizá sea este desconocimiento la causa por la que la roca haya sufrido grandes desperfectos hace unos años, cuando se realizaron trabajos de investigación minera.
Este es el principal motivo por el que decidí comunicar la noticia a la autoridad competente de la J.CyL. y, después de un tiempo prudencial, publicarla en “nuestro” blog


domingo, 7 de septiembre de 2008

LAS GRANDES LOSAS

En la entrada anterior, Galovart expuso una teoría según la cual los habitantes prehistóricos de lo que hoy conocemos como La Maragatería pudieron haber empleado para sus monumentos lajas de pizarra local ante la imposibilidad de encontrar piedras redondas y alargadas.
No es descabellada esta idea. Si quieres construir una estela o menhir y no tienes materia prima, lo lógico es adaptarse a lo que te ofrece tu entorno.
Estoy seguro que acabará apareciendo algún lugar con el emplazamiento original ( o en su defecto los alvéolos que señalarían dicho emplazamiento)
Mientras tanto tendremos que conformarnos con las rocas que han llegado a nosotros después de un largo viaje, seguramente con muchas paradas en distintas “estaciones”
Como esta magnifica losa de pizarra de más de dos metros y medio de larga y situada en un parque cerca del consultorio médico de Castrillos de los Polvazares.

En una visita con un matrimonio francés (Jean Pierre y Marie Claude) apasionados por los petroglifos de todo el mundo, el se acercó a la mesa del pequeño parque y descubrió estas cuarenta cazoletas.

Pregunté a Lorenzo Cabezas, un buen amigo que vive en Castrillos y me dijo que hace casi diez años que se trajo esa piedra para hacer el parque y que la recuerda en un paraje situado a poco mas de un Km. del pueblo.
Cuando le dije que si había reparado en las cazoletas me contestó que esa era la razón por la que la habían traido.
En otra ocasión os mostraré fotos del CENTENAR de cazoletas que encontre en otras piedras de este emblemático pueblo maragato